El amor es protección poderosa
Todos lo poderes creados por el hombre
se empequeñecen ante el poder del Amor.
En sus murallas nadie se debilita,
quien cumple sus leyes renace fortalecido .
pues el que guarda sus sabias enseñanzas
encontrará la fuente del Mesías eterno,
que es espada y escudo sin límites.
Quien cumpla sus sabios mandamientos,
no sentirá temor y guardará justo provecho,
algo así como el labrador precavido,
que elige y reserva sus mejores semillas
para sembrarlos y obtener buenos frutos.
Bajo sus hospitalarias y tibias alas
se abrigan los mejores sueños.
El necio ignora su donosa luz.
y el malvado huye siempre de ella.
Sus manos son una lección infinita
de dar y recibir con optimismo.
Cuanto mas aprende de él, mas lo ignoras
es como aprisionar el agua entre los dedos,
o querer ver las estrellas en un solo instante,
porque su mejor defensa es la sabiduría
y su mejor espada su gloriosa obra.
Para el amor no existe real enemigo,
porque quien malamente lo agravia
se dañará así mismo con su propio filo.
Por eso el inicuo sigue teniéndole temor,
y el delictuoso escapando de su designio,
porque quien trasgreda su buena lección
como dice en las Santas Escrituras,
estará apurando su muerte segunda,
queriendo hallar la vida, pero sin espíritu.
EL amor es pasión y comprensión mutua
En la orquestación del verdadero amor.
la pasión que es solo deseo vehemente,
siempre será el matiz activo de fulgor,
potencia vital de nuestra elevación gradual.
De allí que existan diversas tonalidades,
y por lo mismo diversos enamoramientos.
Ya que el amor impulsado por la pasión,
sintetiza el tiempo de su mejor intensidad.
Porque es agitación que sacude al espíritu,
lo eleva y lo baja en espontáneo descompás
puede derrumbarnos en su tremendo sismo,
cual débil estructura si no le damos frenar.
EL Amor siempre será voluntad de cambio,
porque hace el bien en su capacidad de dar,
mientras la pasión te mece cual frágil palmera,
entre remolinos de un desesperado huracán.
Puede envolvernos en su atracción física,
cual melodía placentera de dulce susurrar,
arrobarnos el alma entre variados colores,
buscando dulces hallazgos de ignoto pintar.
Por ello debemos dominar siempre la pasión
para que ella jamás nos domine integral,
siempre será necesaria al cumplir una misión,
debiendo modularla para que no sea tu mal.
El amor apasionado lo marca lo repentino,
y la propia madurez lo vuelve tranquilidad.
Darse tiempo es recomendable y el buen tino,
para consolidar la pareja o volverla fugaz.
El amor real, no se enfría de un solo tirón,
porque es proceso cualitativo de realización
No se incendia de un solo golpe para tiznar
porque su llama no es leño para alumbrar.
Su luz proviene de la misma comprensión
que ambos ponen cual lámpara de salvación.
El amor sin pasión es una hoguera sin fuego
fuente de agua estancada produciendo helor,
Puede despertarte los ánimos con tal potencia,
cual chispa que nos incendia la pradera de sol
La pasión fuera del amor es un intenso deseo
una necesidad que se hace foco de atención
Puede bajar el ritmo si el interés se vuelve rutina,
haciéndose costumbre cuando ya no hay amor.
Jamás pretendas destruirle en sus mandamientos
no los separes nunca, creyendo que uno sea amor,
andan de la mano y necesitan estar siempre juntos
como energía vital para activar poderoso motor .
